
Incluyo ahora aquí, en mi propio espacio, este texto que se publicó anteriormente en Shiny Demise Project. ¡Gracias a dicho sitio por haberme dado esa oportunidad! Hoy estamos aquí, con la misma interrogante: ¿Cómo abrir la mirada interior?
Para responder a esta pregunta, habría tantas respuestas como seres humanos sobre la faz de la Tierra. Es decir que, como lo dijo sabiamente León Felipe, aquel querido poeta español del destierro en México: “Nadie fue ayer, ni va hoy, ni irá mañana hacia Dios por este mismo camino que yo voy. Para cada hombre guarda un rayo nuevo de luz el sol… y un camino virgen, Dios”.
Esto viene a propósito del comentario de una lectora respecto a un texto publicado anteriormente en esta página: “El Sueño Colectivo”. Se pregunta cómo ha sido el proceso de mi despertar.
Considero que todos llegamos a este plano como una chispa de luz que tendrá que luchar por abrirse camino entre su propia oscuridad e ignorancia, para salir finalmente avante. Hay quienes despiertan desde muy temprano. A otros quizás nos lleva más tiempo el adormecimiento.